La foto pertenece al entierro de D. Joaquín, fallecido en Yepes (Toledo) en el año 1952.
Fue Párroco de Cazorla después de la guerra, entre los años 1940 y 1943.
Durante su permanencia en Cazorla, entre otras labores, fue el impulsor del cine Parroquial en la Ermita de San Antón, (convertida en una pequeña sala de cine) en donde se proyectaron películas de carácter religioso.
Después de su marcha a Toledo, fundó un convento, del cual se hicieron religiosas varias mujeres cazorleñas.